| Descripción |
Estandarte bordado en oro, plata y seda que representa a la Virgen con el Niño, en posición sedente, sobre un pequeño escudo de Aragón. La Virgen ostenta corona y viste con ropajes blancos y azules y manto dorado, mientras que el Niño, también coronado, viste íntegramente de oro. El trono presenta elementos arquitectónicos renacentistas, como la columnas de orden clásico, el friso o el remate a modo de frontón curvo, adornado por tres formas esféricas.
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